MÁS HOLLYWOOD EN MI VIDA.

Carta de una lectora: Como deshacerse de un marido aburrido.

Realmente era aburrido y no sabía cómo dejárselo claro así que le dije “mira, quiero tener un poco más de Hollywood en mi vida”. Lo comprendió y yo me quedé con los niños.

Luego me fui a bailar con un amigo. ¡Qué ganas tenía de bailar!. Y me acordaba de mi marido que siempre me pisaba, hasta que ya directamente dejamos de bailar.

Otro día cené con un vividor que no me dejaba hablar y me contaba un millón de aventuras interesantísimas. ¡Qué ganas tenía de escuchar a un hombre así, tan interesante!.

Por fin llegó el temido día en que tenía que volver a ver al pesado y se le ocurrió llevar a los niños a ver una película a media tarde. No se le podía ocurrir nada más original. 

Cuando llegamos al cine me sorprendió lo vacío que estaba, pero ya se sabe a esas horas de películas infantiles ... Por fin empezó la película y la pantalla se llenó de carteles de Hollywood. De pronto aparecieron nuestros viejos videos, uno detrás de otro. Aquel viaje del que ya no me acordaba. Aquel vestido tan espantoso. Los niños en el zoo. Toda la película de nuestra vida. Y de fondo aquella canción que sonaba constantemente, tan monótona, tan aburrida como él, pero que es la banda sonora de mi vida. Una vida que baila entre pisotones a un ritmo monótono, una película que no me depara sorpresas, en la que soy la protagonista y un aburrido con bigote siempre estará esperándome …

Le agradecí la ocurrencia de poner los videos en el cine, seguramente el alquiler de la sala le costó más de lo que puede permitirse, pero me cogí a los niños y me fui.

Han pasado cinco años y hace poco le encontré donde yo le había empujado. Y es que en Hollywood cuando te descuidas te quitan el papel de tu vida. Ahora hago de secundaria, no me pisan los pies cuando bailo y he escuchado miles de aventuras con y sin cocodrilo, pero añoro ser la protagonista de una mañana monótona de domingo en el zoo viendo al bigotudo aburrido con nuestros hijos. Así es Hollywood.