RAVEL Y LA AMUSIA. Amusia, la enfermedad que impide crear música. "Tengo la cabeza llena de música, pero no soy capaz de escribirla". Ravel Etimológicamente es la suma de la negación “a” con la música “musia”. La amusia puede ser congénita o adquirida debido a una lesión en el cerebro que impide reconocer tonos o ritmos musicales o de reproducirlos. Se producen trastornos del sentido del ritmo o dificultad para diferenciar las características básicas de una nota o una serie de notas. El caso extremo es la incapacidad para diferenciar entre sonidos de diferente tonalidad. Generalmente está asociada a sordera para las palabras y agnosia auditiva (lesiones del lóbulo temporal dominante) o aislada (lesiones en uno u otro lóbulo temporal o en ambos). Michel Thaut, neurólogo y músico, sostiene que la música produce emociones y acciones, y que a la vez activa estructuras cerebrales que rigen el sistema motor, concluyendo además que los códigos temporales de la música refuerzan las áreas cerebrales motoras, lo que le ha permitido diseñar ejercicios con patrones musicales que ayudan a centrar la atención, reforzar la memoria y potenciar el control cognitivo. Por eso Thaut considera que la música puede ser terapéutica por ayudar al control cognitivo y a reorganizar pensamientos y sensaciones. El Che Guevara sufrió amusia y creía que tenía sordera para tonos y cada vez que se encontraba en una fiesta tenía que recurrir a sus amigos para que le dijeran qué ritmo era el que estaban tocando. El caso más famoso es el de Ravel. En 1928 se estrenó el ballet Bolero en la Ópera Garnier, bajo la dirección de Walthrer Straram, con la participación de la bailarina rusa Ida Rubinstein, quien le había encargado, antes de partir para Nueva York, "un ballet de carácter español". Ravel se inspiró una antigua danza andaluza: el bolero. Ravel tuvo relación con los austriacos Wittgenstein, esta vez no con el filósofo, sino con su hermano, el pianista austríaco Paul Wittgenstein, a quien se le había amputado el brazo derecho a consecuencia de las graves heridas que había sufrido durante la Primera Guerra Mundial, y que le visita entre 1929 y 1931 para que Ravel le componga compuso el Concierto para la mano izquierda, obra de un solo movimiento de grandes contrastes y fuerte impacto. Una obra que le afectó con una grave depresión, insomnio … El 8 de octubre de 1932 se subió a un taxi y el automóvil chocó. Aparentemente Maurice no sufrió ninguna lesión de importancia. Pero a partir de entonces su salud empeora. En 1933 nota que no puede ejecutar ciertos movimientos. Presenta dificultad para escribir, incluso coger un objeto al alcance de la mano. En esta época dice: "Tengo la cabeza llena de música, pero no soy capaz de escribirla". El 15 de febrero de 1935 viaja a Madrid y desde allí al hotel de la Mamounia en Marrakech. Le dan unas fiestas impresionantes y visita Sevilla, Córdoba, Vitoria y Pamplona. Sus médicos tomaron la decisión
de una intervención neuroquirúrgica en la que falleció.
La causa de su amusia fue que había sufrido un traumatismo craneoencefálico
debido al accidente automovilístico de 1932
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