RETRASAR LA APARICIÓN DE LAS ARRUGAS Con los años la piel se vuelve más seca, más delgada y menos elástica. La mayoría de las arrugas se deben a cambios en la piel que se producen por el envejecimiento, que es un proceso natural mediante el cual la piel se vuelve más seca, más delgada y menos elástica. Los Antioxidantes. Están presentes en frutas y verduras como Fresa, Kiwi, Cítricos, Arándanos, Pimientos, entre otros. El abundante consumo de vegetales, aceite de oliva y legumbres es una importante prevención contra la arrugas. Hidratación. El agua contribuye
a la hidratación de las células. Beber entre 1 y 2 litros
de agua por día aumenta la limpieza de la piel, previniendo la aparición
de arrugas.
Protector solar y gafas de sol. Usar protector solar. Nada de sol al mediodía ni durante las horas en las cuales sus rayos son más intensos. Según investigaciones con personas mayores, algunas de sus arrugas disminuyeron al eliminar la exposición a los rayos ultravioletas. El envejecimiento cronológico produce arrugas finas pero la piel a pesar de ello continúa siendo suave y lisa, el deterioro ocasionado por el bronceado hace que las arrugas se tornen más marcadas y profundas, así como se intensifica la flacidez cutánea. Esto se debe a la paulatina ruptura de las fibras de colágeno a un ritmo mayor que el producido por el paso del tiempo por sí solo y por su parte la elastina se acumula en forma anormal. No fumar, el tabaco favorece el rápido envejecimiento de la piel No consumir grasas saturadas, fuente de radicales libres que implican el envejecimiento de la piel. Evitar el sobrepeso. Aquí
la claves hacerlo antes de los 40 porque después de esta edad el
adelgazamiento deja arrugas.
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