12 de junio de 2016
MENUDOS PEDAZOS DE PADRES. No es lo mismo querer a los hijos que disfrutar de ellos. Muchos hombres querrían disfrutar más de sus hijos, les gustaría dejar su vida profesional a un lado para pasar todo el tiempo posible junto a sus hijos recién nacidos. Muchos lo hacen, dan el paso y ya se verá. Otros se aguantan las ganas y se esclavizan en un trabajo que esté donde esté y dure lo que dure, garantizará una vida mejor para sus hijos. Los dos tipos de padres quieren a sus hijos, unos disfrutan de ellos y dan más valor al tiempo que les dan que a lo que podrían ganar en sus trabajos. Otros renuncian a la parte más importante de sus vidas, la paternidad recién estrenada, y se dejan su tiempo y su salud delante de un ordenador o de una máquina. Los dos tipos de padres quieren a los hijos por igual, los dos son grandes padres, los dos se sacrifican y les dan lo único que tienen, su salud y su tiempo. Si tuviesen algo más también se lo darían y en esa idea, unos les dan lo máximo y renuncia al placer de disfrutar de ellos. A lo mejor están equivocados,
a lo mejor no, pero menudos pedazos de padres.
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