BEBER AGUA PARA NO COMER DEMASIADO. El cerebro confunde la sed con el hambre. Beber agua es esencial para el correcto funcionamiento del organismo. El agua elimina las sustancias innecesarias, mejora el metabolismo, permite quemar más calorías y disminuye la sensación de hambre pues el cerebro confunde la sed con el hambre. Lo recomendable es beber una media de un litro de agua al día por cada 30 kilos de peso. Beber agua durante las comidas es una buena forma de reducir la velocidad de la ingesta logrando diferenciar el apetito psicológico del fisiológico. Se recomienda beber agua en lugar
de refrescos o zumos, sobre todo si estos contienen azúcares.
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